Nos lo decía nada menos que en los Desayunos de Televisión Española el primer secretario del PSC- PSC (PSOE), Miquel Iceta: ni él, ni su partido, nunca habían celebrado ni iban a celebrar la Fiesta Naccional de España, del 12 de octubre. Y hablaba el responsable de un partido que ha dado varios ministros al Gobierno de España, entre ellos, dos ministros de Defensa, que vice-presidieron en esta fiesta desfiles de tropas, al grito de «¡Viva España!». Como se ve, la contradicción no puede ser mayor y explica muchas cosas que hoy suceden en Cataluña y en toda España. Para redondear el esperpento, nos hacía saber que él sólo celebraría el aniversario de su declaración pública como gay en un día como éste, elegido por haberse llamado antes esta fiesta el «dia de la raza» (sic). Por lo visto, un partido que nunca se ha llamado español, sino federal, de no se sabe qué Federación, no puede celebrar el día nacional de España, pero sí el día nacional de Cataluña, en honor del austracista español Rafael de Casanova, y cantando el bárbaro himno que lleva el estribillo: !Bon cop de falç! (¡Buen golpe de hoz!). Pero no es sólo Iceta y su partido a la deriva. Recuerdo que, cuando estábamos en Estraburgo, un día como éste, en mis tiempos del Consejo de Europa y del Parlamento Europeo, sólo dos o tres parlamentarios del Grupo socialista acudíamos como invitados a la Embajada este día del 12 de octubre, y eso que nos invitaba un embajador socialista, Baeza, representante de un Gobierno entonces socialista. Pero, ya se sabe, lo de la Hispanidad -criterio internacionalista e hispano-americano capital para que un Gobierno socialista español eligiese este día (Ley 18 / 1987) como fiesta nacional, y, además, eso de la Virgen del Pilar y de la Guardia Civil, conmemoraciones tradicionales que se añadían a la fecha, les sonaba raro o mal a muchos. Y aqui podriamos hablar del déficit nacional-patriotico de que adolece la izquierda española, mucho antes que Franco, y que sólo se revierte cuando lo nacional-patriótico coincide con su propio régimen o su propio interés electoral. Pero los socialistas y socialdemócratas europeos son, en cambio, muy nacionales-patriotas, y los comunistas rusos, cubanos o chinos…, no digamos. Allì, «Patria o muerte». Aquí, Patria igual a fascismo o conservadrismo. Pero dejémoslo por ahora. Que hay que celebrar muchas cosas en este 12 de octubre, comenzando por la mejoría de Teresa Romero.