La verdad es que, mientras cada uno de nosotros va a lo suyo y todos a lo nuestro de cada día, un grupo de 17 de los más prestigiosos científicos del mundo, galardonados con el premio Nobel, han decidido adelantar dos minutos el reloj del Apocalpisis, una figura simbólica que desde 1947 alerta sobre la vulnerabilidad del mundo frente a un desastre a escala planetaria. Si en 1991  se encontraba a 17 minutos del final, ahora está a solo tres. Un cambio climático sin control, la modernización global de las armas nucleares y los descomunales arsenales atómicos son las mayores amenazas actuales de la humanidad. El año 2014 ha sido el más caluroso desde que comenzaron los registros en 1880, y 9 de los 10 años más cálidos han ocurrido desde el año 2000. Sin un drástico cambio de rumbo, que no se prevé, los gases de efecto invernadcero emitidos  a finales de este siglo habrán transformado profundamene el clima de la Tierra, amenazando gravemente la civilización humana. Por otra parte, y como si eso no fuera suficiente, Estados Unidos de América y la Rusia postsoviética renuevan y mejoran sus depósitos atómicos, y otros países, como Israel, Corea del Norte, China, India, Pakistán, Reino Unido y Francia, los imitan. La probabilidad de una catástrofe global es muy alta –concluyen los científicos- y las acciones necesarias para para reducir el riesgo de desastre deben tomarse cuanto antes.- Pero ¿quién en esos países mencionados, y en todos, se considera de verdad ciudadano y patriota de la Tierra?