Karen Armstrong (1944), inglesa de ascendencia irlandesa, estudiosa de las religiones, autora de libros recientes, como Campos de sangre, La religión y la historia de la violencia (2015), que contesta a medias a la pregunta de si la religión es una creación humana, simplemente con un rotundo sí, dice a continuación que Europa se está quedando muy pasada de moda en su secularismo. Ex monja católica, alejada después de su fe, y ahora experta en religiones y sin llegar a llamarse agnóstica, reconoce que en otros lugares la gente se está haciendo más religiosa, para bien o para mal. (…) La idea de que la religión es dañina no es muy inteligente. Sostiene que su compatriota Dawkins tiene una idea muy equivocada de la religión, y estima, en el terreno de la instrucción y de la educación. que los chicos deben ser educados no de una forma sectaria, pero sí para entender la religión porque es un hecho en la vida humana, igual que la cultura o que la economía. Entre otros servicios, la religión da la posibilidad de escapar del horror que nos rodea y busca sentido para nuestras vidas. Autora también de otro libro, Islam (2001), afirma que el Corán es un mensaje de paz; que Mahoma fue un jefe de Estado, cuando todo Estado tenía que hacer la guerra, que llevó la paz a Arabia y gestionó su unificación mediante la diplomacia; que la yihad significa en el Corán sobre todo la mejora personal y compartir con los pobres; que el Corán tiene un actitud mucho más positiva hacia las demás religiones que ninguna escritura hasta ese momento, pero sí cree al mismo tiempo que el Islam necesita una reforma, que no sea dura, cruel e intolerante, como fue la reforma (Reforma) europea del siglo XVI. Sintiéndose ella misma Charlie, piensa, sin embargo, que insultar a cosas o personas es contraproducente, y peligroso mostrarnos arrogantes y poco respetuosos, con los no occidentales, dentro de este mundo globalizado.