Decía Zorba el Griego que le sería más fácil morir, si ese mismo día murieran todas las mujeres bellas del mundo. Leyendo al poeta Juan de Mena, aunque no es mi mejor poeta en el siglo XV, encuentro entre sus mejores poemas de amor, esta octava menor, que me parece contiene el mayor piropo posible: su amada es más bella que todas las bellas que han existido y su beldad amenaza con llevar bajo tierra a todas las bellas que se atrevan a competir con ella:
E las fermosas passadas,
passadas daquesta vida,
son contentas e pagadas,
porque fueron sepultadas
primero que vos nacida.
E las que quedan agora,
a quien vos fazéis la guerra,
si su beldad no mejora,
a vos tengan por señora
o se pongan so la tierra.