Ha sido, a pesar de todo, una victoria europeísta (demócratas cristianos, social-demócratas y liberales) en toda la Unión Europea, y eso es lo que cuenta. Cuando estábamos en el Parlamento Europeo, todavía decían algunos que íbamos a defender España en Europa, y les decíamos que al revés: a defender Europa en España y en los 12 Estados miembros de entonces.
Pues, ahora, lo mismo. Electores europeos, escritores europeos, nos alegramos de la victoria de ayer en toda la Unión.
Los resultados, vistos desde aquí, y para la historia local española, son muy interesantes, pero todo dependerá al final de lo que suceda próximamente en Cataluña. Tiempo habrá de comentarlo.