Villancico del 24 de diciembre
«En el principio existía la Palabra y la Palabra estaba con Dios
y la Palabra era Dios. (…) La Palabra era la luz verdadera
que ilumina a todo hombre y viene a este mundo.»
(Jn 1, 1, 9)
Ven, Hijo del Cielo,
a nuestra Tierra.
Tú eres la esperanza
de nuestra espera.
Vence con tu Luz
nuestras tinieblas.
Tú eres la esperanza
de nuestra espera.
Dinos tu Palabra
que nos libera.
Tú eres la esperanza
de nuestra espera.