Codicia, avaricia, usura

El alcalde peneuvista liberal de Bilbao, Iñaki Azkuna, al entregar, el pasado jueves, el premio Norte-Sur al sacerdote misionero Josetxu Canibe, comenzó diciendo que seguro que JC había hecho mucho más por el género humano que todos los banqueros americanos que se han enriquecido. En la anterior crisis la causa fue el petróleo y el vendaval de países del sudeste asiático que irrumpieron cocn fuerza competitiva en el mercado mundial. Ahora la crisis se debe al egoísmo, a la avaricia, a la codicia de unos banqueros que han llevado al límite al sistema creyendo que aguntaría «ad infinitum«. Y Azkuna reparte responsabilidades entre los neocom americanos, el Gobierno español (que conocía la burbuja inmobiliaria y no admitió la crisis) y los políticos en general que, elección tras elección, hacen creer a la sociedad que todo es posible, hasta convencerle de que el maná cae del cielo y no es producto del trabajo, del sudor y muchas veces del sacrificio, contribuyendo así a una sociedad blandengue, sin punch, acomodaticia. Cuando, según él, no hay otra fórmula que el trabajo y un nuevo orden mundial, en el que el control pueda prevenir estos desaguisados, en que unos codiciosos hunden sus empresas, reciben pingües beneficios y dejan al mundo en la pobreza.- Qué bien oir a un alcalde de nuestros días hablar así.