Utilicemos una parábola hipotética y una argumentación ad hominem, para que todo sea más claro. ¿Qué dirían los progretarras de hoy, si un hipotético e ilegalizado partido abernazi (nazi patriótico) preparase unas listas electorales junto con dos partidos democráticos, como el PP y UPyD, en las que el 80% de las mismas estuviera ocupado por independientes de aquella formación? ¿Las considerarían listas del partido abernazi? ¿Se asombrarían, se indignarían, se escandalizarían, si la Abogacía y la Fiscalía del Estado impugnasen esas listas y pidieran su anulación al Tribunal Supremo? ¿Y si éste las anulara?. – Pues ¿en qué quedamos?