Oh, Llave de David
y Cetro de la casa de Israel,
que abres y nadie puede cerrar,
y cierras y nadie puede abrir,
ven y libera a los cautivos de su tenebridad,
de la hosca amenaza de una muerte servil.
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PD. La presidente del Congreso -aquella militante del PSC, que fue castigada por el Grupo Socialista de la Cámara por votar a favor del derecho de autodeterminación- y el presidente del Senado salieron ayer, como lacayos del Gobierno -los que hablan de la separación de poderes- arremetiendo contra el Tribunal Constitucional, exagerando, ocultando, mintiendo. La presidente del Congreso llegó a decir que un solo diputado puede paralizar las Cortes, ¡cuando es menester 50!, y el del Senado se sacó de la manga, sin que viniera a cuento, una enmienda de Gregorio Peces Barba defendiendo la inviolabilidad de las Cortes, que es como defender la pureza del aire. Han hecho suya buena parte de la doctrina sobre la democracia de PODEMOS y del populismo sudamericano. La democracia de la actual Europa no es la numérica, sino la liberal; no la del mero número como fuerza, sino la de todos los derechos humanos, incluidos los derechos de la minoría.
Es la primera vez que esto sucede, sí, pero porque es la primera vez que PSOE y PODEMOS se saltan todas las barreras y procedimientos normales parlamentarios para dejar sin voz y sin recursos democráticos a la oposición en puntos tan graves, como es la defensa de la Constitución y la manera de elegir al Tribunal Constitucional. Por otra parte, algunos miembros del TC no tienen el mandato caducado, sino prorrogado, y en anterriores ocasiones otros magistrados en situación similar tomaron decisiones, que nadie discutió.
Vuelvo a decir que la raíz del mal está en que tanto PSOE como PP prefirieron elegir jueces a su medida, en vez de a medida de la Constitucón y del pueblo español. Y eligieron políticos como jueces. Y quisieron que votaran, cada uno con su marca, como mandara el partido. Y así lo han hecho, con alguna excepciones, como la de Manuel Aragón, al que luego insultan llamándole tránsfuga ideológico. De aquellos polvos, estos lodos. Ya veremos cuál es el propósito de enmienda de todos estos malos demócratas, que a sus adversarios, convertidos en enemigos, llaman una y otra vez golpistas.