Llévate,
Niño mío,
al papa
Benedicto,
teólogo
eximio.
Inscríbele cuanto antes
en el primer curso empírico
de la excelsa Academia
de los Estudios Celestes e Infinitos.
Archivo del Autor: vmarbeloa
Villancico del papa Ratzinger
Santo Niño de Araceli,
ha muerto el papa,
que un dĺa se quitö la capa
pontifical.
Dale un buen sitio en el mapa
celeste,
junto al Portal.
Cumplo años
31 de diciembre
La noche del 31 de diciembre,
fiesta de San Silvestre,
muchos romanos, durante muchos siglos,
arrojaron por terrazas, ventanas y balcones,
las viejas cosas que sobraban en las casas.
Era un viejo rito de fin de año:
purificación y vida nueva.
Pero nunca tiraron por la borda
aquello que los hizo un pueblo singular en la historia del mundo:
el modelo de Estado del Senado y Pueblo Romano (SPQR),
y la fe católica traída
por dos apóstoles judíos y cristianos,
Pablo y Pedro,
martirizados en Roma.
Dios-Hombre
Una de dos:
en el caso del Dios-Hombre
sabemos cómo es el hombre,
no sabemos cómo es Dios.
Vaticano-Imperio
En el Vaticano
no queda un solo soldado romano.
Del vasto Imperio
queda solo un alto sahumerio.
Faraón-Herodes
Matón de niños judíos fue,
según la Biblia, el Faraón.
Y en el cruel Herodes
revivió, en parábola, el matón.
El día en que vinieron los romanos
El día en que vinieron los romanos
-el año cuatro antes de Cristo tras la muerte de Herodes-
a Galilea,
no solo hubo una fuga general,
sino que a sangre y fuego fue la pelea
desigual.
Y feliz si hubo mortal
que pudo escapar de la espada
imperial.
El «belén» del papa Francisco
En el presepio del Vaticano,
la Curia
con su habitual incuria,
quiso que el papa Francisco
hiciera de rey Melchor.
Pero el papa, algo arisco,
prefirió hacer de pastor
del aprisco
de Belén.
Con lo que se armó el belén
y el cisco
del papa Francisco.
Navidad
En Roma no saben que
-en Belen ha nacido
un Dios por ellos desconocido.
-la última buena nueva
cantan los ángeles sobre una cueva.
-el genuino Salvador
es Jesús nuestro Señor.
-la fuerza poderosa del imperio
nunca podrá destruir el misterio.
-la Virgen Santa María
trae al mundo la alegria.