Releo cinco breves sentencias de Demócrito, todas juntas en la colección Diels-Kranz, que parecen escritas para muchos de nosotros en días como éstos:
– Toda tierra es accesible para el hombre sabio, pues la patria del alma buena es todo el universo.
– La ley quiere favorecer la vida de los hombres, pero sólo puede hacerlo cuando ellos deseen experimentar algo bueno. Ella muestra su virtud propia sólo a quienes le obedecen.
– La guerra civil es mala para todos, pues tanto los vencedores como los vencidos experimentan el mismo daño.
– Sólo cuando hay concordia es posible para las ciudades llevar a cabo las grandes obras y las guerras; de otro modo, no.
– Es preferible la pobreza en una democracia a la llamada felicidad que da un gobernante autoritario, como lo es la libertad a la esclavitud.
– La guerra civil es mala para todos, pues tanto los vencedores como los vencidos experimentan el mismo daño.
– Sólo cuando hay concordia es posible para las ciudades llevar a cabo las grandes obras y las guerras; de otro modo, no.
– Es preferible la pobreza en una democracia a la llamada felicidad que da un gobernante autoritario, como lo es la libertad a la esclavitud.