El programa de TV2, de anteayer, Academia: 25 años de cine, fue para mí un programa muy bien hecho, divertidísimo y aleccionador. No conocía yo casi nada de sus inicios, de sus problemas, sus pequeños conflictos. Ni de muchos de sus presidentes, aunque, en estos últimos años, nunca he perdido una función de los Premios Goya. Me ha servido para entender ciertos momentos difíciles, criticados también por algunos dirigentes, de la Academia y para superar cierta crítica frívola, que no distingue autores, obras y estilos, y eso sin aludir la crítica cainita de cierta extrema ferocidad. He sacado una impresión (convicción) muy positiva en general. He visto bastante cine español. Me guste unas veces más o menos, o no me guste otras nada, veo ahora con claridad que la Academia, la Escuela de Cine, los Premios… han conseguido levantar una colectiva institución eficaz y sólida que, con empeños constantes, buenas maneras, rectificaciones, sacrificios, concesiones y generosidades, ha reunido, fomentado, animado, protegido, y, en buena parte, creado un puñado de buenos autores con obras premiadas aqui y fuera de aqui, en los mejores certámenes intrnacionales, y ha unido a todo el mundo español del cine, con alguna excepción todavía, en torno a un proyecto común, que no existe en otros muchos sectores de nuestra sociedad. Enhorabuena.