Irati y los Reyes

 

(Irati, helechal en vascuence o euskara, nombre de un conocido bosque y río pirenaico, es aqui una niña de siete meses).

 

Irati,

¿qué quieres

que te traigan 

los reyes?

 

Te trajeron la vida.

Te trajeron a este

mundo del siglo veintiuno,

fascinante y estridente.

Navegas ya en la historia,

viajerita de chupete,

por la ruta del destino,

sin detenerte.

La estrella se detuvo

en tu casa dos veces,

y se llenó de luz,

de luz de Oriente.

Te esperaban tus padres;

mucho más impaciente,

tu hermanica mayor,

que te cela y protege.

 

Irati,

¿que quieres

que te traigan

los Reyes?

 

Manojitos de rosas

son tus mofletes

y alhelí tu sonrisa

blanda y silente.

No necesitas nada.

Todo lo tienes,

florecida de besos,

bendecida de leche.

Babosilla traviesa,

tu sola eres

el mejor de los regalos,

el singular juguete

que reparten los Magos

más complacientes,

con el que juegan todos

los que te quieren.

 

Irati,

¿qué quieres

que te traigan

los reyes?

 

Dejemos que el mañana

feliz te sueñe

entre ríos y helechos,

nieblas y nieves.

Hoy tus manos activas

todo lo quieren,

todo lo miran,

todo lo prenden.

En el suelo del mundo

vivaz te mueves,

gatita bulliciosa,

gatita alegre.

Y en los brazos del aire

ríes y creces,

que el reino de la vida

te pertenece.

 

Irati,

¿qué quieres

que te traigan

los reyes?