Buena idea la del séptimo marqués de Salisbury, líder de los conservadores británicos en la Cámara de los Lores, de convertir esta polémica Cámara en una especie de Senado del Reino Unido (Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte) y el Parlamento de Westminster, en Parlamento solamente inglés. ¿Por qué van a tener los otros territorios su Parlamento o Asamblea, e Inglaterra, el territorio británico más numeroso y rico, no? ¿Por qué los diputados escoceses, muchos de ellos independentistas, van a poder intervenir en la vida de los ingleses desde Westminster, mientras los diputados ingleses no tienen nada que hacer en los asuntos del Parlamento escocés? Sería como si Castilla y León, Castilla La Mancha y la Comunidad de Madrid (la Castilla histórica) no tuvieran Cortes o Asambleas propias, autonómicas, y sólo les quedaran las Cortes de la Nación, mientras las demás Comunidades gozaraan de Parlamentos autonómicos propios. ¡A cada cual lo suyo: Unicuique suum!