El hombre rico y Jesús

 

(Mc 10, 17-27; Mt 19, 16-26; Lc 18, 17-27)

 

Un hombre rico, adulador, se acerca a Jesús.
Le llama Maestro bueno, y Jesús en seguida le replica
que bueno solo es Dios.
Y luego le pregunta qué hacer
para poder heredar  la vida eterna.
El Maestro le recuerda los mandamientos de la Ley,
pero todo ellos ya los ha cumplido desde niño.
Jesús entonces  -única excepción en todos sus llamamientos-
le invita a vender todos sus bienes,
repartirlos a los pobres y seguirle después.
Pero él, al oír esto, se marcha entristecido.

 

Qué difícil – dice por tres veces el Maestro a sus discípulos –
que un rico pueda entrar en el Reino de Dios!
Literalmente:
Es más fácil que un camello entre por el ojo de una aguja
que entre un rico en el Reino de Dios.
(El camello era entonces el animal más grande
y el ojo de la aguja la apertura más pequeña).

 

Se asombran los discípulos, que conocen a ricos que son buenos
y saben que el Maestro come con algunos de ellos
y les invita a repartir algunos de sus bienes,
y que algunas mujeres del Grupo, acomodadas,
los apoyan y sostienen:
¿Quién se puede salvar?
¿Qué lenguaje provocador es ese?

 

Jesús emplea imágenes fuertes, chocantes,
paradójicas y escandalosas
para lograr la impresión más honda del mensaje en sus oyentes.
Jesús habla desde el Reino de Dios que avanza.
Esa es la única riqueza que cuenta.
El único tesoro que vale.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Teresa Perales

 

 

          Le preguntan a nuestra reina de los Juegos Paralímpicos, con 28 medallas en su haber, y otras tantas en campeonatos mundiales, Teresa Perales, si Dios es culpable de que esté en una silla de ruedas:

Ni por asomo.

Y si es responsable del milagro de las medallas Y ella, recordando su devoción a la Virgen del Pilar, bien ostensible en su silla de ruedas:

Puede ser que ahí sí haya ayudado un poquito. La verdad, un muchito.

¿En qué cree Teresa Perales?, le preguntan de nuevo:

-Es bonito y saludable creer. Porque, de lo contrario, te falta esperanza, algo a lo que aferrarte. Es muy importante para el ser humano pensar que no se acaba todo aquí. Como es lógico, he acompañado a varias personas en su final. Para mí no ha sido una desgracia, sino una suerte, porque he intentado darles tranquilidad en esa despedida, confiando en que hay algo más allá

Las lenguas del misterio

 

                                (El papa Francisco dijo en el encuentro interreligioso con jóvenes,  tenido recientemente en Singapur, que las religiones pueden ser concebidas como diferentes lenguas para llegar al misterio de Dios.

Sobre esta hermosa descripción más que definición, el profesor Pedro Manuel Fernández Castelao, profesor  de Antropología Filosófica en la universidad pontificia de Comillas, ha escrito en VN unas glosas, que me parecen excelentes, y que resumo aquí con gratitud y admiración profundas)

-No hay lengua falsa. Todas son verdaderas. Más o menos ricas y fructuosas, cualquier hablante encuentra en su lengua materna el camino acertado de llegar al misterio de lo real.

-No existe la gramática completa, el vocabulario absoluto, la lengua perfecta. El  tesoro de la  realidad no cabe en ninguna de ellas, aunque en todas se refleje con brillantez y verdad.

-No se puede confundir a Dios con ninguna religión. Lo divino de ellas es su fundamento, no lo que ellas son en el espacio y en el tiempo. A Dios no se le tiene de una vez por todas; ni en Jesucristo siquiera, cuando se ha revelado insuperablemente de una vez para siempre.

-Una cosa es su máxima revelación y otra su recepción. Ninguna Iglesia es propietaria del misterio de Dios, revelado en plenitud en el predicador de Nazaret. Es su testigo, su reflejo, su anuncio. Está siempre recibiendo lo que que siempre debe estar comunicando.

-Las religiones no son divinas. Divino solo es Dios. Aquellas solo son las formas humanas con que los pueblos configuran su experiencia de Dios-

-Dios no cabe en ninguna religión. A todas las supera. Pero todas ellas tienen la capacidad de decir desigualmente el misterio de Dios.

-Es mejor estudiar y aprender religiones que perseguirlas.

-La realidad es a las lenguas lo que Dios a las religiones. Misterio esencial. Misterio inefable.

La hora de BILDU

 

                           Ya era bien sabido que, tras ERC, PNV y JUNTS, pediría pronto BILDU la parte de socio preferente que le toca, la parte de  indulto  y amnistía que le corresponde. Y así ha sido, tomando como soporte una legislación general europea, enmendada con razón por el presidente Rajoy en su momento, vuelta a ser enmendada ahora por los comunistas de SUMAR, pasada desapercibida por la oposición, y votada después por el Congreso en pleno. Lo que ha aprovechado el Gobierno de Sánchez y el grupo parlamentario socialista para arremeter hipócritamente contra el PP y al mismo tiempo satisfacer a sus socios herederos de ETA-Batasuna. ¡Se les computan los años de condena cumplidos en Francia a los más crueles presos terroristas de ETA y se les descuentan así varios años de prisión en las cárceles de España! Por voluntad del PSOE y de todos sus socios de gobierno.

Pero lo que, después de Cataluña, espera también Euskadi de Pedro Sánchez no es eso solo. Ya el lehendakari peneuvista Pradales comienza a hablar del Concierto Político, un concepto paralelo al Concierto Económico, que su antecesor Urkullu ya sacó a colación, cuando presentó, defendió y consiguió aprobar  en el Parlamento Vasco, con los votos de BILDU, su Nuevo Proyecto de Status Político Vasco. El PNV quiere hacer de aquella concesión de Cánovas del Castillo, en 1878, tras la supresión de los Fueros del País Vasco, recién terminada la guerra carlista, fundamento de relación bilateral total, característica del Estado confederal al que aspiran, sumado también el derecho a decidir. En eso coinciden, como primer paso, PNV y BILDU. La independencia a voz en grito es ya solo cosa de BILDU y de los partidos y movimientos que lo componen. Pero, conociendo a Sánchez, y agradecido a las recientes concesiones, el PNV juega no solo a reclamar el traspaso de las otras 29 competencias estatutarias que viene reivindicando desde 1979, sino a intentar ir cambiando el modelo de Estado autonómico por el confederal -lo contrario del federal-, al menos para ellos. Y, si es posible para Cataluña y Galicia, mejor. Nunca más fácil de conseguir que de un presidente del Gobierno, que necesita para seguir respirando los 5 votos del PNV y los 6 de BILDU.

 

«La voluntad de no saber»

 

                      Tal es el título del libro publicado por tres autores mejicanos, Alberto Athié, José Barba y Fernando M.  González. La cosa va con el tristemente célebre Marcial Maciel, fundador y líder de la congregación religiosa de los Legionarios de Cristo en 1941.

Según los documentos del Archivo Secreto Vaticano que revelan los autores, y que eran ya conocidos por muchos, una vez que se supo de sus abusos cometidos con menores y sus relaciones con diversas mujeres, de las que tuvo varios hijos, el papa Pío XII le llamó a Roma el año 1956, quien le suspendió como superior de su congregación por motivos conocidos por el Santo Padre, a fin de obligarlo a curarse. Pero no se curó, siguió haciendo de las suyas y siguió en la primera fila del poder y del corromper.

Total que tamaño depredador, agresor sexual compulsivo y drogadicto  fue encubierto durante 50 años, hasta los últimos tiempos de san Juan Pablo II, que fue su mayor protector.

El cardenal brasileño Braz de Aviz, arzobispo emérito de Brasilia y actual prefecto del Dicasterio para los institutos de Vida Religiosa y las Sociedades de Vida Apostólica, llegó a declarar a la revista española Vida Nueva el año 2019 que el Vaticano tenía pruebas desde 1943 de los abusos de Maciel, y que le protegió una mafia que no representaba a la Iglesia, pero que pertenecía a la misma y a sus más altas esferas.

Entre latines, en Silos (y II)

 

                     A la hora de Vísperas, la amplia iglesia neoclásica del monasterio benedictino de Silos está llena a rebosar. Cuento catorce monjes, la mayoría jóvenes o maduros. Cantan con la contención y suavidad que solo recuerdo haber oído en Solesmes, Montserrat y algunas veces en Leire. Todo el salterio, antifonario e himnario lo cantan en latín, y solo la brevísima lectura y las oraciones en la lengua de los fieles.

Ni mi latín me sirve para seguir la oración, porque no oigo más que el susurro de la cantiga. Cuando terminan las vísperas y  el templo se despeja, me acerco al brillante presbiterio -un prodigio de proporcionalidad de Ventura Rodríguez- y a uno de los monjes mayores, que se ha quedado en su asiento del coro, le pregunto por qué no emplean, como tantas iglesias a la hora del culto, una pantalla, donde podrían aparecer en castellano los salmos que ellos cantan en latín. Me contesta amable que los textos  en castellano están en unas hojas que pueden recoger los fieles. No los hemos visto y, además, seguramente han llegado para pocos. Le recuerdo la misa en latín no entendida y de espaldas de antes del Concilio y me sonríe propicio.  Me vuelvo a otro monje más joven, que aparece en el coro. Como le digo que vengo de Pamplona, me pregunta con monacal retranca si en Leire ponen en la pantalla los textos traducidos, y a renglón seguido me pregunta si he corrido delante de los toros en San Fermín. Está claro que he dado en hueso. Me ha faltado decirles que en Montserrat hace muchos años que los benedictinos cantan las Vísperas y el resto de las Horas en catalán.

Al día siguiente, en la misa dominical solemne del monasterio, recitada en castellano,  canta el coro de monjes las partes invariables tomadas de la misa gregoriana Stelliferi Conditor Orbis, la llamada Misa XIII (para Memorias), una de la misas más difíciles y menos oídas del canto llano.  En la homilía, al celebrante le toca hablar sobre el divorcio, según el texto primitivo de Marcos, cuando todavía no había eximentes, y tiene tantas dificultades para hacerse con su público como las tuvo el mismísimo Jesús con los suyos, y como las tendrá toda la Iglesia a través de los siglos. 

Pero la gente sale contenta de la liturgia monacal. Más allá del texto, con ser imprescindible, y de la enjundia musical, está el embrujo o halo religioso-místico de la trascendencia y sobrenaturalidad en lo natural del misterio litúrgico. Que es lo que se busca y se necesita.

Ni que decir tiene que, a pesar de un delicado calabobos que se nos echa encima, no dejamos de ver el claustro. Se mojan levemente las lavandas de los parterres de boj del patio claustral, y nosotros volvemos a contemplar asombrados las estrías de la fina piel de piedra de las figuras bíblicas de los capiteles; las plumas de piedra de las aves; las arrugas de piedra de los animales salvajes; las hojas aserradas de piedra de los árboles y plantas; los puntos de piedra de las ropas de las personas…

Hasta que, sin poderlo remediar, vuelvo a recitar, esta vez no desde el primer piso del claustro, sino desde el suelo de la crujía de enfrente, el perfecto soneto de Gerardo sobre el ciprés de Silos:

Enhiesto surtidor de sombra y sueño…

Covarrubias bajo la lluvia es tan bella o más que sin ella. Además, la asociación San Olav de la villa celebra hoy el día de la hermandad con Noruega, la patria de la princesa Cristina, cuya escultura está rodeada de flores y de las banderas de las dos naciones. En la plaza mayor, junto al torreón de Fernán González, y mientras el embajador noruego comparte manteles con el alcalde de la villa en un cercano mesón, dos señoras entusiastas venden bajo las arcadas salmón noruego y vino del Duero. 

Nos despedimos de este rincón de Castilla acompañando un rato, al otro lado de las murallas, al río Arlanza, al que hemos visto nacer, que corre ya mocetón entre una alta y frondosa guardia de álamos, sauces, olmos, fresnos y alisos.

 

Entre latines, en Silos (I)

 

                            Seguimos al río Najerilla, el más largo y hermoso de los ríos riojanos -país con nombre de río-, por las infinitas curvas de la carretera, entre las infinitas encinas de sus infinitos montes, con la alegría otoñada de los fresnos, sauces, chopos y serbales que despuntan en la hondonada fluvial y en algunos huecos montanos. Anguiano, como oasis humano en medio del desierto montaraz. Dejamos a un lado la vieja Valvanera monacal y llegamos al embalse  de Mansilla, con menos de un tercio de  su caudal, a pesar de las últimas lluvias.

Se diría a primera vista que el día está tristón, pero no: está otoñal. Una neblina transparente vela veladamente las cumbres de los montes Cameros,  del Urbión, de la Sierra de la Demanda, y de los montes que los siguen, y ponen en el  campo ese inconsútil halo vespertino y nostálgico, que no saben darle ni el verano ni el invierno.

Por terrenos más  llanos, y siguiendo a ratos al mismo  río, llegamos a Neila,  el pueblo burgalés de su nacimiento, y de su primer nombre,  que no lo pierde hasta llegar a tierras riojanas. De unas cuevas oscuras fluye el agua clara y canora, con solo un rodal de sauces llorones como testigos, y un mayo altísimo, punteado con una banderita española, bien sujeto al suelo con una corona de clavijas de madera. En un pequeño parque cercano almuerza un grupo madrugador. Nosotros preferimos un banco rustico, adjunto al manantial.

Nos acercamos luego, ya en en términos de Quintanar de la Sierra, comarca de Pinares, a la fuente Sanza, nacedero del Arlanza, uno de sus nacederos en dos surgencias, lugar idílico para contemplar, yantar, sestear y pasear. Y, por lo que vemos, para llenar las cestas de setas, en uno de los poco parajes no limitados por el Acotado.  Por Palacios de la Sierra, Castillo de la Reina… llegamos a Salas de los Infantes, donde visitamos la necrópolis pétrea medieval de Santa María, una de tantas de la zona. Nos paramos, más adelante, en el disperso pueblecito de Carazo, hoy solo con 43 habitantes, cuna del cardenal Segura, bajo los imponentes Sierra y Pico de su nombre, famoso por su castillo moro, su batalla, y por ser nombrado en el Poema de Fernán González:

Entonces era Castilla un pequeño rincón
(…)
moros tenían a Carazo en aquella sazón.

Y atravesando el multicolorado cañón de Mataviejas, socavado por el río homónimo, que nace allí, llegamos  al atardecer a Silos, cuya plaza mayor es uno de los lugares sagrados de Castilla. Con su iglesia de San Pedro, de los siglos XII y XVII, sede de la Virgen del Mercado, patrona de la localidad; el monasterio benedictino de Santo Domingo de Silos, fundado en el siglo X, con su claustro románico tal vez el más bello del mundo; las dos casonas heráldicas; el anchurón mercantil…. y mucha gente visitante. Hace cincuenta años, no era ni sombre de lo que es hoy. Con muchos menos habitantes, pero mucho más bello y próspero que entonces.

 

Una alianza contra la Constitución

 

                     No me extraña mucho que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se haya dejado aconsejar por BILDU, heredero de ETA-BATASUNA, para reformar la llamada ley mordaza, o ley de seguridad ciudadana. Es pura lógica de poder. Hace unos meses aceptó que el fugado de la justicia, Puigdemont, y sus abogaos le redactaran el anteproyecto de ley sobre la amnistía de los golpista catalanes.

Día llegará, si no lo impedimos entre todos, que, con tal de seguir sosteniéndose en  el gobierno, intente, quién sabe si de nuevo con observadores internacionales, formar una alianza para reformar la Constitución de 1978, con mayoría de sanchistas, independentistas, confederalistas y populistas de variado pelaje, a fin de de comenzar a derribarla.

Éxodo en Tierra Santa

 

                   Desde el 7 de octubre del año pasado, cuando comenzó la tragedia, más de 500 cristianos han abandonado la Franja de Gaza. Casi la mitad de los 1.200, tanto católicos como ortodoxos, que aún vivían allí. Una gota en el océano de casi dos millones de habitantes gazatíes. Trabajadores indios, chinos o tailandeses sustituyen hoy  a gran parte de los 200.000  palestinos, que antes de esa fatídica fecha llegaban cada día desde Cisjordania a trabajar al otro lado del muro de separación. Las autoridades israelíes consideran que los ataques del 7 de octubre fueron organizados gracias a la información proporcionada por los trabajadores árabes autorizados a entrar en Israel.

Desde 1967, fecha de la nueva guerra y de la ocupación de los territorios árabes por el Gobierno de Israel, el éxodo de los cristianos a Europa y sobre todos a Estados Unidos de América y Canadá ha sido constante. En toda Tierra Santa, y tras los difíciles tiempos de la pandemia, durante el reciente conflicto se han terminado las peregrinaciones. Solo raros y contados grupos se han atrevido a acercarse. El turismo se ha acabado. Los hoteles han cerrado sus puertas. En Belén, donde el turismo representaba el 85% de los ingresos, la catástrofe es completa y vacíos quedan los 45 hoteles de la ciudad.

De los 35.000 cristianos -con mayoría de ortodoxos- de hace medio siglo en Palestina, solo quedan 12.000.