Santiago Montobbio

Mi amigo y colega, el fértil poeta barcelonés Santiago Montobbio, me envía su último libro Absurdos Principios Verdaderos, escrito en 1987, libro de poemas en verso y en prosa, pero sobre todo  en verso. Montobbio, que escribe sólo para salvarse a sí mismo, y vive ajeno a cualquier uso frívolo de la poesía, ha colaborado y colabora en nuestra revista Río Arga.  Buscador y explorador apasionado de su vocación creadora, su poesía, que llega de muchos  manantiales -Cernuda, Borges, Valente…-, pero sobre todo del suyo propio, puede parecer dificil y  hasta hermética, pero se trata de todo un mundo coherente, visionario y realista, directo y depurado, sufrido y liberador, lleno de invenciones y recursos, que sólo se revela a quien lo explora minuciosamente con el autor. Elijo uno de los últimos poemas, que lleva el curioso título de «Soneto»:

Un hombre anda y la calle es gris.
Un hombre es amordazado por el miedo
y la calle es gris. Un hombre
desentierra los celestes cofres
con que resguardó el amor
de las inclemencias del tiempo.
Sombras de años van a devorarle
entre grises calles. Sombras de años
para que un hombre tenga el rostro
herido por el adiós último
y para que la calle sea gris y nadie sepa
si conduce a la plaza mayor
de la infancia o al olvido.