Vencer el miedo

 

           Julián Carron, presidente de Comunión y Liberación, toma pie de la sacudida emocional y de la emergencia sanitaria internacional que ha provocado el corona-virus para recordar una frase de su fundador don Luigi Giussani  de que la fuerza de un sujeto radica en la intensidad de su autoconciencia. Porque el enemigo contra el que nos vemos combatiendo  no es el virus, sino el miedo, un miedo que nos descompone y nos desborda, nos desconcierta y hasta nos hace  perder los estribos.

Cada crisis, según Hannah Arendt nos obliga a volver a las preguntas, es decir, a nuestra autoconciencia y a nuestra relación con la realidad. ¿Qué puede vencer el miedo? Y así como el miedo del niño sólo puede ahuyentarlo la presencia de la madre, sólo la presencia del Dios que entra en la historia puede vencer el miedo profundo que paraliza el fondo de nuestro ser. También la presencia de las personas en las que se documenta la victoria de Dios, su presencia real y contemporánea, y por ello un modo nuevo de afrontar las circunstancias, lleno de una esperanza y de una alegría normalmene desconocidas, y a la vez orientado a una laboriosidad indómita.

Sólo una esperanza pofunda puede hacernos capaces de afrontar las circunstancias sin huir, de liberarnos del miedo, usándolo incluso como materia de trabajom, y de ayudarnos a recomenzar la vida, sin que la sospecha y el temoer al contacto con el otro no sean la última palabra.